La banca española remonta

20-2-2015

El sector bancario español parece que renace y comienza a despertar tras años de depresión. El año pasado el beneficio global del sector ascendió a 12.054 millones de euros, el mejor dato en seis años.

Atrás quedan los años duros de esta interminable crisis económica. Tras las pérdidas del sector bancario en los años 2011 y 2012, el sector regresa a los números verdes.

Esta subida supone un incremento del 37,13 % de beneficios con respecto a 2013, año en que el sector empezó a remontar aunque tímidamente. Parece que la tendencia al alza se ha consolidado y los beneficios empiezan a ser cada vez mayores, eso sí aún lejos de los obtenidos en los años previos al estallido de la crisis.

Sin embargo, y como venimos siempre avisando desde Bancomparador, no es el momento de lanzar las campanas al vuelo, al menos aún, porque según indica Analistas Financieros Internacionales (AFI), de no ser por las plusvalías el sector estaría aún en números rojos.

¿Por qué crece la banca española?

La mejora de hecho se produce por la reducción de costes, por ahorro en provisiones y en el ahorro en la remuneración del pasivo. A esto se une el incremento en plusvalías lo que hacen disparar los resultados de las grandes entidades.

La subida de los intereses de los nuevos préstamos y la reducción de la retribución de los depósitos a plazo también han influido en esta mejora en los resultados.

También podemos incluir entre las razones, la reestructuración del sistema bancario español, al pasar de tener más de 70 entidades en 2008, entre bancos y cajas, a menos de 20 entidades de cierta dimensión en la actualidad. Esto ha supuesto la reducción del número de sucursales de manera drástica, lo que les ha permitido un considerable ahorro

Tendencia alcista

Además Standard&Poor´s prevé que este año el beneficio se acerque a los 14.000 millones de euros, con lo que parece que la tendencia de crecimiento se consolida. La agencia de rating justifica sus previsiones confiando en la reducción de la morosidad bancaria y la mejora de la rentabilidad. Aunque señalan los riesgos que siempre deben estar presentes, principalmente un posible, y nada deseable, empeoramiento del cuadro macro-económico, así como la existencia de un alto nivel de activos tóxicos.

Sin embargo podemos concluir que estos resultados son positivos y esperanzadores para un sector que ha sufrido un profundo cambio en todos estos años sombríos para la economía española.

Javier Queipo Gómez