Participaciones Preferentes

25-7-2014

Hablar de Participaciones preferentes (también denominadas acciones preferentes cuando son emitidas por una sociedad extranjera) es estar refiriéndose a un instrumento complejo de elevado riesgo.

Como consecuencia, invertir en ellas puede llevar a obtener rentabilidad, así como pérdidas en el capital invertido.

Las Participaciones preferentes se consideran un instrumento “híbrido” entre renta fija y variable ya que presentan analogías y diferencias con ambas formas de inversión.

Formalmente, tienen características comunes a la deuda subordinada. Contablemente son valores representativos del capital social de la sociedad que los emite.

Las Participaciones preferentes son instrumentos financieros emitidos por una sociedad con carácter perpetuo, que no confieren a sus titulares participación en su capital, ni derecho de voto, ni de suscripción preferente.

La rentabilidad de estos valores no está garantizada y generalmente tiene carácter variable. A pesar de ser emitidas con duración perpetua, el emisor suele reservarse el derecho de amortización a partir del quinto año, previa autorización del supervisor (en el caso de las entidades de crédito, el Banco de España).

La remuneración de las participaciones preferentes, depende, de las condiciones incluidas en el contrato de emisión. Generalmente esta remuneración suele tener carácter fijo el primer año, estando normalmente referenciada a algún índice de referencia (por ejemplo Euribor) más un determinado diferencial, a partir del segundo año.

Como comentábamos anteriormente la rentabilidad de estos instrumentos financieros no está garantizada ya que la remuneración está condicionada a que la sociedad emisora de las participaciones preferentes obtenga los beneficios necesarios.

En nuestro país, las participaciones preferentes, cotizan en el mercado AIAF. En caso de quiebra de una entidad, los últimos inversores en cobrar sólo antes de los accionistas, son los titulares de preferentes. Hasta el 2003, eran emitidas por filiales instrumentales radicadas en el extranjero –fundamentalmente centros offshore -, sin embargo a partir de este año se reguló su emisión desde territorio español.